En Taiwán existe una peculiar cultura del cabaret, muy diferente a como es entendida en Europa. Se trata de un cabaret de carretera, camiones-teatro o camiones-escenarios que recorren todo el país hasta el más recóndito lugar, para acercar este singular espectáculo de luz al mundo rural donde despierta pasiones.
El fotógrafo taiwanés Shen Chao-Liang, ha reunido desde el año 2005 una muestra de fotografías de estos escenarios oníricos bajo el nombre de STAGE. Todas ellas realizadas a la puesta del sol, lo cual añade esa extraña belleza que da la luz del atardecer, sumado a la ausencia de personas en las imágenes que las hace aún más inquietantes. Al mirarlas me parecen como de otro mundo, un mix entre platillos volantes y atracciones de feria, pero sorprendentemente hermosas. Es la extraña belleza de lo kitsch.
Comenta Chao-Liang que su intención ha sido la de mostrar esta singular industria de su tierra y todo el mensaje cultural que emanan estos gigantes de luces, que trascienden el tiempo y el espacio.
Dicen que en todo Taiwán existen más de 600 escenarios móviles de este tipo, que llegan a pesar de 8 a 15 toneladas de media. Los artistas que actúan en ellos suelen ser mujeres jóvenes, muchas abandonan pronto esta vida de luces de neón y carretera para casarse.
"STAGE" ha sido mostrado desde el año 2006 en varias ciudades de Taiwán, además de Tokio, Osaka, New York, Shanghai, Hong Kong, Toronto y finalmente en Sevilla en la AJG Gallery (Pasaje Francisco Molina, 17 - Pasaje Villasís - Zona Centro).
Os dejo con un vídeo ilustrativo del proceso de montaje y puesta en escena posterior de uno de estos tótem de luz.
Comenta Chao-Liang que su intención ha sido la de mostrar esta singular industria de su tierra y todo el mensaje cultural que emanan estos gigantes de luces, que trascienden el tiempo y el espacio.
Dicen que en todo Taiwán existen más de 600 escenarios móviles de este tipo, que llegan a pesar de 8 a 15 toneladas de media. Los artistas que actúan en ellos suelen ser mujeres jóvenes, muchas abandonan pronto esta vida de luces de neón y carretera para casarse.
"STAGE" ha sido mostrado desde el año 2006 en varias ciudades de Taiwán, además de Tokio, Osaka, New York, Shanghai, Hong Kong, Toronto y finalmente en Sevilla en la AJG Gallery (Pasaje Francisco Molina, 17 - Pasaje Villasís - Zona Centro).
Os dejo con un vídeo ilustrativo del proceso de montaje y puesta en escena posterior de uno de estos tótem de luz.
http://www.shenchaoliang.com
10 delikados susurros:
Qué chulas, me encantan esos escenarios y esas luces que me llevan a la esencia del circo o el cabaret. Muy buen descubrimiento.
Abrazos
Es verdad que también recuerdan al circo o incluso a un plato de TV. En la web de Chao-Liang se pueden ver otras fotografías de otra temática y son realmente muy buenas. Un abrazo
Realmente resultan inquietantes, como abandonadas. Curiosa expo. Abrazo
Muy interesante. Las fotos tienen su gracia, esos escenarios chirriantes de luces de coloritos sin que aparezca ni una figura humana (ni animal, si llega el caso). Yo conozco una fotógrafa de Bruselas que hace fotos así, inquietantes, mediante una cámara oscura, directamente sobre papel. Abre el objetivo (un agujero, en realidad) y deja la cámara quieta durante horas. El efecto es fantasmagórico; ni gente ni coches aparecen porque van demasiado deprisa y no impresionan el papel. Bueno, estas de Taiwan no llegan a tanto, pero me recuerdan algo a las de Christine Felten (se llama así)
Acabo de mirar fotos de la Felten y es verdad que parece que de cualquiera de ellas va a salir un zombie de The Walking Death. Bueno Monsieur, y contaremos con su magnánima presencia en Hispalis?? :-)
Pues yo confieso no estar preparada para apreciar la belleza de estos curiosos monumentos de luz. Me recuerdan efectivamente a atracciones de feria,o a la Vegas, algo así, quizás por eso lo que me evoca es estridente y no me roza esa parte de lo que sea que me tuviera que conmover. Yo creo que la belleza conmueve, en este caso, a mi no me toca, lo que no quiere decir que no esté.
Puedo sin embargo apreciar el valor de la muestra como exponente cultural de ese fenómeno, por otra parte, curioso para Oriente, que a otros niveles es tan sosegado.
Pero como siempre amiga, descubrimos y aprendemos con tus hallazgos. Gracias.
Un beso.
Es verdad Viena que no es la belleza de los gigantes de luz lo que habla, sino la mirada del fotógrafo hacia ellos (la luz del atardecer, la ausencia de vida.. encendidos pero inertes). Vistos en su contexto, con la música a todo trapo, la gente achuchando, el olor a frito de los puestos lindantes... la cosa tiene que cambiar mucho, pero mucho :-D
Un abrazo, nos vemos pronto por aquí.
¡Hola! Quería recomendar tu artículo en google+ pero no veo el botoncillo :) Soy novata en el google+ Saludos lluviosos desde Barna
Marta
http://www.abilingualbb.blogspot.com
Hola Marta, yo estoy en google + así que puedes hacerlo desde allí directamente si nos enlazamos como amig@s, cual es tu nombre allí?
Un saludo y gracias!
¡Preciosas las fotos!
He llegado aquí a través de Bitácora Culinaria, y creo que voy a hacerme asidua.
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